Los entrenadores recomiendan a los principiantes tener cuidado con el rey propio y enrocarse tan pronto como sea posible, pero a alto nivel los grandes maestros pueden percibir el peligro de tener al rey en el centro de una forma mucho más precisa y en muchos casos el rey en el centro está seguro, lo que les permite conducir ataques por el flanco o crear un poderoso centro. Un gran aficionado a tal estrategia era Mikhail Botvinnik, que lo llamaba 'estrategia del enroque diferido'.